El sector del fitness puede ayudar a que la actividad física sea contagiosa

Cuando piensa en enfermedades, ¿qué le viene a la mente? Si los juegos y películas populares como Pandemia o Contagio sirven de indicación, es muy probable que sean enfermedades altamente contagiosas como la gripe, el sarampión o el Zika. Sin embargo, si nos fijamos en las enfermedades que causan más daño -las que realmente deberíamos temer- no las encontraremos contenidas en zonas de cuarentena ni en ninguna película de Hollywood de alto presupuesto. Encontrará que estas enfermedades causan millones de muertes en todo el mundo cada año.

Nos referimos a las enfermedades no transmisibles (ENT), como las cardiopatías y los accidentes cerebrovasculares, que durante los últimos 15 años han sido las principales causas de muerte en todo el mundo. La buena noticia es que la Organización Mundial de la Salud (OMS) está recurriendo a la industria del fitness para ayudar a hacer algo contra estas enfermedades.

Las ENT no se transmiten de una persona a otra, pero su prevención -en este caso, la actividad física- puede ser contagiosa y, en cierto modo, con eso cuenta la OMS. La OMS afirma que la falta de actividad física -o la inactividad física- se estima que es la causa principal de aproximadamente el 21-25% de los cánceres de mama y de colon y del 27% de los diagnósticos de diabetes.

¿Qué se está haciendo para ayudar?

La actividad física es tan vital para la salud mundial que la OMS dedicó un año entero a desarrollar y crear el Plan de Acción Mundial sobre la Actividad Física 2018-2030 (GAPPA), durante el cual la IHRSA presentó comentarios sobre el borrador. El GAPPA tiene cuatro objetivos que pretenden garantizar que todas las personas tengan acceso a entornos seguros y oportunidades para ser físicamente activas en su vida diaria, mejorando la salud individual y comunitaria, contribuyendo en última instancia al desarrollo social, cultural y económico de todas las naciones.

Los cuatro objetivos del GAPPA son:

1. Crear sociedades activas
2. Crear entornos activos
3. Crear personas activas
4. Crear sistemas activos

Con la ayuda de la industria del fitness, la OMS espera que los objetivos estratégicos y las medidas políticas enumeradas en el GAPPA conduzcan a una reducción relativa del 15% de la inactividad física en adultos y menores en todo el mundo para 2030. Una reducción de esta envergadura ayudaría a frenar el coste mundial de la inactividad física, que actualmente se estima en 68.000 millones de dólares australianos al año en costes sanitarios directos y pérdida de productividad.

La actividad física es imprescindible

Estar físicamente activo ya no es un bien que hay que tener, es un deber. Fiona Bull, doctora y directora del programa de prevención de enfermedades no transmisibles de la OMS, afirma: "Las personas fueron diseñadas para moverse, y el ejercicio es esencial para cada parte de nuestros sistemas biológicos". Bull dice que si usted está en condiciones de hablar con los responsables políticos locales debe hacer hincapié en los amplios y bien establecidos beneficios del ejercicio para la salud, pero también en las consecuencias de no ser activo. Que, como ya hemos mencionado, pueden provocar una amplia gama de enfermedades que tienen costes sanitarios a nivel individual y económico.

Bull dice que la industria del deporte y el fitness tiene "un papel muy importante que desempeñar". Los países de todo el mundo han empezado a reconocer la necesidad de aumentar la actividad física, y la industria del fitness está en una posición única para difundir estilos de vida físicamente activos de una persona a otra, asegurándose de que los entornos, los programas y las oportunidades estén ahí y se adapten a personas de todas las edades y capacidades. Un efecto secundario sería atraer a las personas menos activas.

"Tenemos que ser innovadores. [La gente no viene al gimnasio por una razón", dice Bull. "Todo se reduce a la cultura y el contexto, y a conocer realmente quién es tu cliente". Recomienda crear este cambio de cultura asociándose con empresas y organizaciones locales y añadiendo más aspectos sociales a la actividad física. Muestre a su comunidad todas las formas divertidas de ser activo. Se trata de conseguir que más gente sea más activa.

Los programas que se centran en la participación de la comunidad pueden conducir a poblaciones más activas físicamente. Bull dice que la OMS ha visto que esos tipos de programas funcionan, y la OMS está muy interesada en trabajar con todas las partes interesadas -incluidos los clubes de salud- para lograr los objetivos de la GAPPA. En diciembre de 2018, IHRSA y otras organizaciones mundiales clave asistieron al primer diálogo del sector deportivo de la OMS, que el Dr. Bull calificó de gran éxito. En febrero de 2019 tuvo lugar un segundo diálogo para identificar los proyectos que el sector puede ayudar a implementar en los próximos años.

Liderando el camino

La industria del fitness puede liderar el camino aumentando nuestra promoción de la actividad física y la necesidad de reducir el comportamiento sedentario. Podemos asociarnos y orientar a las empresas, organizaciones y gobiernos locales y nacionales para que creen programas de actividad física e incentivos que ayuden a sus empleados, miembros y electores a ser más activos.

En todo el mundo, uno de cada cuatro adultos y tres de cada cuatro adolescentes (de 11 a 17 años) no cumplen las recomendaciones globales de la OMS sobre actividad física. Es fundamental que pasemos a apoyar y valorar la actividad física regular. Sabemos que es más probable que las personas sean activas cuando las personas que las rodean valoran el ejercicio.

Activar una comunidad es una de las formas más poderosas de cambiar el comportamiento y las normas sociales, así es como la industria del fitness puede ayudar a que la actividad física sea contagiosa. Capacitemos a las personas y a las comunidades para que tomen el control de su salud, participen activamente en el desarrollo de políticas, reduzcan las barreras y proporcionen la motivación para ser activos.